Cuando vivía en Madrid visité varios espacios de coworking en diferentes zonas de esta linda ciudad, al regresar a Lima mi objetivo de negocio fue tener mi propio Coworking.  Como en todo emprendimiento el capital de trabajo hay que conseguirlo y los recursos humanos también El Covid 19 no ayudó mucho, fueron dos años complicados.
De vuelta casi a la normalidad el nuevo escenario político no me lo puso nada fácil, pero la perseverancia, la ayuda de mi familia especialmente el motor de mi vida, mi hija y tres ángeles que creyeron en mi y en mi proyecto hicieron posible que hoy GOWORK sea una realidad.
418 metros cuadrados de colaboración y creatividad para que fluyan las ideas y los proyectos, donde una jornada de trabajo duro sea tan importante como la convivencia con los compañeros, donde lleves a cabo tus mejores proyectos en un ambiente cooperativo y ameno donde compartirás aprendizajes y establecerás sinergias con otras empresas para crecer más rápido.